12 cosas que las personas emocional y mentalmente fuertes no hacen
A menudo escribo sobre las cosas que creo que todos deberíamos hacer, intentar o experimentar para maximizar nuestro éxito y felicidad. Sin embargo, no siempre son las cosas que hacemos las que marcan la mayor diferencia en nuestras vidas, a menudo son las cosas que evitamos hacer las que tienen el mayor efecto. Como seres humanos, tenemos una fuerte aversión a no Al hacer, sentimos que para producir resultados, debe haber una acción inicial.
Sin embargo, debido a que casi siempre estamos haciendo algo, acumular más y más a menudo tiene un efecto negativo, en lugar de uno positivo. Entre los mentalmente fuertes, hay varias acciones que se evitan para producir el mayor beneficio en el menor tiempo posible.
Estas acciones son las que los mentalmente fuertes evitan, y que debemos considerar adaptar como propias:
- No pierden el tiempo compadeciéndose de sí mismos. No se sientan a sentir lástima por sus circunstancias o por cómo los han tratado los demás. En cambio, asumen la responsabilidad de su papel en la vida, trabajan para cambiar lo que se puede cambiar y tienen en cuenta que la vida no siempre es fácil o justa.
- No viven en el pasado. Concéntrese en el momento presente y en el futuro cercano. Entienden que el pasado está fuera de nuestro control y que el futuro lejano es tan predecible como el clima de este invierno.
- No se centran en cosas que no pueden controlar. Reconocen que a veces lo único que pueden controlar es su actitud. Después de todo, la paz interior comienza en el momento en que eliges no permitir que un evento incontrolable o una persona controle tus emociones. Aprenda más paz y coraje para seguir adelante en la vida en aceptación y serenidad
- No permanecen en su zona de confort. Una zona de confort es un lugar peligroso, un abismo oscuro donde cualquiera que permanezca allí durante demasiado tiempo se pierde por completo. Permanecer dentro de su zona de confort es renunciar a la vida.
- No se preocupan por complacer a todos. Reconocen que no necesitan complacer a todos todo el tiempo. No tienen miedo de decir que no o de hablar cuando sea necesario. Se esfuerzan por ser compasivos y justos, pero pueden soportar que otras personas se decepcionen si no cumplieron perfectamente con sus injustas expectativas. La conclusión es que complacer a todos es imposible. Que los puentes que quemas alumbren tu camino.
- No se resisten al cambio. Dan la bienvenida a los cambios positivos en su vida y están dispuestos a ser flexibles. Entienden que el cambio es inevitable y creen en su capacidad de adaptación. El cambio ocurre por una razón. ¡Rueda con él! No será fácil, pero valdrá la pena.
- No cometen los mismos errores una y otra vez. Comete un error una vez, está bien. Comete un error dos veces ... no tan bien. Reflexionar puede garantizar que no repita sus errores. Es importante estudiar qué salió mal, qué podría haber hecho mejor y cómo hacerlo de manera diferente la próxima vez.
- No mantienen la mente cerrada. No lo sabes todo. Incluso las cosas que usted cree saber probablemente no sean del todo ciertas. Si mantiene la mente cerrada, se está impidiendo aprender material nuevo. Si dejas de aprender, dejas de vivir.
- No se centran en sus debilidades. Aunque trabajar en nuestras debilidades tiene sus beneficios, es más importante concentrarse en confiar en nuestras fortalezas. La persona más completa no es la que llega más lejos en la vida. Ser promedio en todos los aspectos te convierte en promedio. Sin embargo, dominar un determinado conjunto de habilidades o rasgo te permitirá vencer a la competencia con menos esfuerzo.
- No esperan resultados inmediatos. La paciencia no es solo una virtud, es la virtud. La mayoría de las personas no fracasan porque no son lo suficientemente buenas o no son capaces de ganar o tener éxito. La mayoría de las personas fracasan porque están impacientes y se rinden antes de que llegue su momento.
- No dejan que las tentaciones fugaces los distraigan de sus sueños. No dejes que las tentaciones de hoy te distraigan de lo que te mereces. Haz lo que tengas que hacer ahora para poder hacer lo que quieras hacer más tarde.
- No se aferran a cada palabra que otras personas dicen sobre ellos. Escuchan su propio corazón e intuición, no la galería de cacahuetes. Así que trata de no tomarte demasiado personalmente las cosas que otras personas dicen de ti. Lo que piensan y dicen es un reflejo de ellos, no de ti. En última instancia, no puedes cambiar la forma en que las personas te tratan o lo que dicen de ti. Todo lo que puede hacer es cambiar cómo reacciona y con quién elige estar.